6.1 Parte 2



Entraron al salón. Las paredes estaban decoradas con tapices de muchos colores y el aire estaba teñido de música y riquísimos olores a carne recién asada. - ¡Mirá MMiisstófelis! –Suspiró Gawain.- Mirá la mujer que está al lado del caballero rojo… ¡Es la mujer más hermosa que he visto en mi vida!

Pero Mistófelis ya no escuchaba, con tantos manjares a la vista, lo único que quería era disfrutar de la fiesta. Esa noche todos bailaron y cantaron y comieron hasta que el sueño les cerró los ojos.

-Bueno, mi señor. –Dijo Gawain. -Gracias, por todo, pero… tenemos que llegar a la cueva del caballero verde. -¡Ja, ja, ja! –Resonó la risa del caballero. -Tranquilos, la cueva del caballero verde está a pocos metros. Quédense, quédense y festejen Navidad con nosotros, que uno de mis sirvientes los llevará a la cueva. -¡Miauuu! –Empezó Mistófelis. -No pod… -¡Muchas gracias! -Interrumpió Gawain mientras miraba a la hermosa dama de reojo. -Nos encantará festejar Navidad con ustedes.